POPULISMO Y (LA VOZ) DEL PUEBLO
POPULISMO Y (LA VOZ) DEL PUEBLO La crisis de legitimidad del modelo de democracia representativa en América Latina, y en otras partes del mundo, es comúnmente interpretada como un terreno fértil para el surgimiento y consolidación de líderes y movimientos populistas. La pertinencia del populismo como categoría política es altamente controvertida. No obstante, en su sentido originario y aproximativo, alude a una ideología, o una visión del mundo, a favor (o en defensa) de (los intereses de) el “pueblo”. Un rasgo distintivo de todo movimiento (identificado como) populista — y que también podría explicar su fuerza persuasiva— consiste precisamente en presentar sus propios reclamos como demandas, no de una parte sino, del “pueblo” entero. Un lugar común en la literatura especializada sostiene que el factor común entre populismo y democracia es la concepción del “pueblo” como fundamento último de legitimación política. Desde esa perspectiva, el populismo, en tanto que defensor de las aspiraciones populares, constituiría un componente esencial de la vida democrática. Sin embargo, conviene preguntarse si cualquier fuerza política que apele a la voluntad popular es por eso mismo democrática. No se olvide que la deificación del “pueblo” también ha servido como un elemento legitimador de ideologías abiertamente autocráticas como el nazismo o el fascismo. Precisamente, para otros la reivindicación del “pueblo” exaltada por el populismo no es más que una fachada que esconde la naturaleza antidemocrática de ese fenómeno. Existen múltiples explicaciones a tan discordantes interpretaciones. Llamo la atención sobre uno de los aristas del problema: el debate arriba expuesto parece estar condicionado por la multiplicidad de significados y concepciones del “pueblo” en juego, una noción que —al igual que la de democracia— es extremadamente ambigua y multifacética. En suma ¿cuáles son las distintas ideas de “pueblo” reclamadas por los populistas? ¿qué vínculo existe entre la reivindicación del “pueblo” como fundamento de legitimación y la democracia? ¿cuáles son las implicaciones del apelo al “pueblo” en clave populista para los regímenes democráticos? Estas son las cuestiones que guían el presente trabajo.