Distancia ideacional, convergencia neoliberal y factores territoriales en las relaciones de Chile con Bolivia y Perú
Desde inicios de los 1990s, los cambios asociados al contexto internacional, regional y doméstico propiciaron una mayor convergencia entre las políticas exteriores de Chile, Bolivia y Perú. El término de la Guerra Fría, la preeminencia del liberalismo económico y político, la interdependencia, el fin de los regímenes autoritarios y los procesos de democratización en la región, fueron centrales en este sentido, y avizoraban el inicio de una nueva etapa de cooperación entre Chile y sus vecinos. No obstante, pese a que efectivamente la cooperación se tradujo en la institucionalización de acuerdos políticos y un mayor intercambio en materia económica, el fantasma de las disputas territoriales históricas se ha mantenido presente en la agenda de la política exterior de Chile con Bolivia y Perú, erosionando los avances alcanzados y limitando las perspectivas de cooperación. ¿Por qué pese a los cambios en el ámbito externo y doméstico, se han mantenido las cuestiones territoriales como centrales en la agenda bilateral? En la siguiente propuesta se argumenta que, además de variables estructurales e institucionales, contemporáneas e históricas, existen aspectos ideacionales que conforman las políticas exteriores de estos países que contribuyen a explicar tanto los aspectos cooperativos como conflictivos de la relación. De esta manera, Chile posee una mayor distancia ideacional con Bolivia, denotada en aspectos geopolíticos tradicionales presentes, sumado a una creciente oposición identitaria. Con Perú, también existen elementos geopolíticos que determinan las políticas exteriores, pero matizados por una menor oposición identitaria a partir de una mayor convergencia neoliberal.